De todos es sabido las propiedades beneficiosas que el AOVE aporta a nuestro organismo, así lo confirman todas las investigaciones y estudios científicos que se ha desarrollado. El AOVE, Dieta Mediterránea y un estilo de vida saludable en el que se adquiera actividad física e ingesta de agua diaria, son la clave y el éxito para tener una salud adecuada.

Este hecho, no solo lo demuestran los estudios que avalan los beneficios del AOVE, si no, que esta vez, es un pueblo, el que nos ratifica, que el consumo de AOVE, puede alargar la vida.

Se trata de Ikaria, una isla griega de 255 kilómetros cuadrados y cerca de 10.000 habitantes, se encuentra a unos 30 kilómetros de la costa occidental de Turquía. Su cresta irregular de montañas cubiertas de matorrales se eleva abruptamente fuera del mar Egeo. Antes de la era cristiana, la isla albergaba espesos bosques de robles y viñedos y olivos salvajes productivos que todavía hoy se mantienen.  Los fuertes vientos que azotan la isla, mencionada en la «Ilíada», y la falta de puertos naturales la mantuvieron fuera de las principales rutas de navegación durante la mayor parte de su historia. Esto obligó a Ikaria a ser autosuficiente.

Esta singular isla, es considerada, como la isla más longeva del planeta, ya que muchos de sus habitantes llegan plácidamente a la edad de 100 años, y es que ellos, aseguran, que en la isla de Ikaria, se olvidan de morir.

Un caso particular fue el de Stamatis Moraitis, 9 médicos le diagnosticaron en 1976 un cáncer con varias metástasis en nivel 4, contaba con algo más de 60 años, lo cual le mantendría vivo como mucho 6 meses, con lo cual volvió de la ciudad a su isla a retirarse en tan apacible lugar bañado por el mar de la autosuficiencia y la tranquilidad, plantó un olivo en el jardín con objeto de llegar a verlo crecer en el poco tiempo que de vida le quedaba, sin darse cuenta, siguió plantando olivos y viñas año tras año, mientras sin tratamiento alguno, viviendo de los frutos de esos olivos, y las vides, desapareció el tumor, y felizmente en la actualidad cuenta con 106 años, un sorprendente historia real en la que la vida regaló a este señor más de 45 años de vida.

Muchos de los lugareños de la zona, aseguran que el éxito de su longevidad reside en su manera de vivir, viven sin reloj, toman aceite de oliva a diario, se levantan tarde, duermen siesta a diario y viven sin prisas. Toman té de hierbas de temporada a diario, que incluye hierbas endémicas de la zona como salvia, diente de león, mejorana, menta y acompañado de un poco de limón. Esta bebida, que la denominan la montaña local, la toman la mayoría de las veces, en compañía.

En búsqueda del secreto de esta prolongada longevidad, han estudiado los hábitos de estos habitantes descubriendo que la dieta de los Ikarians, es rica en verduras, baja en lácteos (excepto la leche de cabra) y productos cárnicos, y también incluía cantidades moderadas de alcohol. Las papas de cosecha propia, legumbres (garbanzo, guisantes y lentejas), las verduras silvestres y la leche de cabra y miel producidas localmente son el éxito de esta longevidad, pero todos los longevos de la isla, aseguran, que junto la montaña local a la que denominan su bebida de té, el AOVE constituye un elemento fundamental que toman y uso a diario. Vivir sin prisas, mantener relaciones sociales con amigos y familiares, dormir siesta, dieta mediterránea y el consumo diario de AOVE nos ayudarán a recordar que podemos vivir mucho más y mejor. Que la muerte se cargué de paciencia.