Desde su antigua civilización, se le ha dado un importante papel a este cultivo. Hoy en día, gracias al creciente consumo interior y la capacidad de adaptación del olivar en diferentes condiciones climáticas, se está trabajando en que siga aumentando la producción local, mediante inversiones en plantaciones y en su industria anexa.
El mercado de aceite de oliva en Egipto se encuentra hoy en día en expansión, superando ya las 80.000 ha de olivar. Las principales variedades que nos encontramos en este país son: Aggezi Shami, Hamed, Toffahi (autóctonas) y Picual entre otras.
Con una producción bruta de aceitunas, sumadas las destinadas a almazara y a aceituna de mesa, cercana a los 500 Millones de kg y generando casi 3 millones de jornadas de trabajo al año, se encuentra dentro de la agricultura con más peso del país.
Cuenta con una industria creciente, siendo en la actualidad 45 almazaras y 110 entamadoras, siendo una potencia mundial en aceituna de mesa.
Estas cifras crecerán en los próximos años gracias al interés y el esfuerzo de diferentes entidades tanto públicas como privadas de nivel nacional e internacional.
Según Juan Vilar “Egipto es una de las más importantes potencias mundiales en materia olivarera, especialmente en lo referente a aceituna de mesa, y toda una fuente de oportunidades para el sector internacional”.
Olivar en Egipto.
El propio mercado local comienza a incrementar su consumo al ser consciente de las propiedades que este producto puede ofrecer y sus beneficios para la salud. Ese incremento del consumo ha visto su reflejo en un aumento de la capacidad productiva, del número de plantaciones y en el interés general por este cultivo en términos de inversión.